Ofrecemos un espacio acogedor, con materiales naturales y estimulantes, adaptado a las necesidades de los mas pequeños.
Nuestro papel durante el proceso es el de acoger a las familias y a sus pequeños, ofreciendo continuidad a sus ritmos, adaptándonos a sus criterios de crianza, acompañarles en el camino hacia su autonomía…
Abogamos por una crianza natural y respetuosa con sus tiempos, que de prioridad al aspecto emocional de los niños y que confíe en sus capacidades de aprendizaje. Que crezcan en un ambiente de calma y respeto que les ofrezca la mejor de las experiencias (lúdicas, didácticas…)
Proponemos proyectos y actividades según sus intereses (nada de fichas ni programaciones estáticas), actividades al aire libre, huerto urbano, reciclaje… que den la oportunidad de experimentar y construir su propio conocimiento sobre sí mismo y su entorno.
La alimentación de los más pequeños también nos preocupa así que ofrecemos la opción de comedor con comida casera, diaria y ecológica con productos de la zona, procedente de cooperativa sin ánimo de lucro así como animamos al consumo de fruta durante los desayunos y tentempiés en ambiente de calma y respeto.
«Lo esencial es que el niño descubra por sí mismo el máximo de cosas posibles. Si le ayudamos a solucionar sus tareas, le quitamos justamente aquello que es más importante para su desarrollo mental. El niño que logra algo por medio de experimentos autónomos adquiere conocimientos completamente distintos a los de un niño a quien se le ofrece previamente la solución»
– Emmi Pikler.